Lefkada, Grecia

La hermosa arquitectura barroca y veneciana está por todas partes en una región impregnada de miles de años de historia, con docenas de encantadores pueblos y ciudades para explorar. ¡Y la comida! En las islas Jónicas, los clásicos griegos se mezclan con un intenso sabor veneciano que no hay que perderse.

Dejar Lefkada sin visitar varias de sus maravillosas ciudades costeras y playas de arena blanca sería un error. La costa está salpicada de algunos de los puertos con más encanto del Jónico, y se podría pasar fácilmente una deliciosa semana en Grecia sin salir nunca de las aguas de Lefkada.

Salir de Lefkada le sitúa en el centro de las islas Jónicas, con Corfú a unas cuarenta millas al norte. Al sur se encuentran Ítaca y Cefalonia, dos de las islas más conocidas del grupo. Ítaca es famosa por ser el hogar de Odiseo. Algunas de las numerosas ruinas que se pueden explorar en la isla podrían ser restos del palacio de aquel héroe griego. También hay coloridos pueblos neoclásicos, fantásticas playas y cafés y restaurantes por toda la isla. La mayor Cefalonia está a poca distancia en barco y es una de las islas más bellas del mar Jónico. Playas, restaurantes, cuevas submarinas y una vibrante vida nocturna son algunos de sus encantos.

Corfú debería formar parte de cualquier viaje al norte, con su encantador casco antiguo, su antigua fortaleza y sus espectaculares playas. Corfú es uno de los principales destinos por su excelente gastronomía, y algunas ciudades cuentan con una animada vida nocturna. La exuberante isla de Paxos es una visita obligada en el camino. La isla es tranquila, con acceso limitado en ferry y sin aeropuerto, por lo que las tabernas no estarán abarrotadas de gente de tierra firme. Y sólo hay que navegar un poco hasta Antipaxos para visitar sus viñedos y playas.

A lo largo de la costa continental, hay muchas ciudades pesqueras, pueblos y playas encantadores que visitar. Es imposible abarcarlos todos en una semana o dos, o incluso en una temporada de crucero.

El mar Jónico se extiende mucho más allá de Zante, la última gran isla de la cordillera tras Cefalonia. Si dispone de más tiempo, puede descender por la costa del Peloponeso y visitar Citera y Nisos o explorar el golfo de Corinto o el de Ambracia.